Las semillas de Lino tal vez no sean tan populares como las de Chía, pero cuentan con unas propiedades muy interesantes para enriquecer tu alimentación. Hoy te vamos a explicar qué es el Lino, su origen, su utilización como ingrediente de cocina y sus 5 beneficios más destacados.
Un poco de Historia…
El Lino es una especie herbácea de la familia de las lináceas. Su origen se sitúa hace más de 5.000 años en el antiguo Egipto, donde ya se cultivaba para confeccionar textil con los tallos de esta planta tan preciada. De hecho, los egipcios utilizaban vendajes de lino para envolver a las momias por la resistencia de los tejidos y cómo símbolo de pureza.
Pero, además del textil, el Lino también se come y sus semillas se consideran como un “súper alimento”.
Aliado en la Cocina…
El lino se ha convertido en un buen aliado para sustituir el huevo en muchas recetas para dietas vegetarianas, veganas y para personas alérgicas a este ingrediente. Simplemente hay que mezclar 2 cucharadas soperas de semillas de lino con 2 cucharadas soperas de agua y dejar reposar la mezcla. Pasados unos minutos, el lino se hidrata y se obtiene un mucílago de textura similar al huevo batido.
Además, podemos moler las semillas con un molinillo de café y espolvorearlas sobre cualquier receta. Funciona fenomenal para combinar con ensaladas, cremas de verduras, para hacer batidos, en los cereales de desayuno, etc.
¿Por qué deberías tomas Semillas de Lino?
- Aporta fibra y enzimas que favorecen el tránsito intestinal.
- Contiene Omega 3 y 6.
- Es rico en vitamina E y vitaminas del grupo B.
- También nos aporta minerales como el hierro, el zinc y el magnesio.
- Es antioxidante gracias al contenido en polifenoles de los Lignanos.
Con todo lo que has leído, ahora seguro que quieres probar las semillas de Lino ¿A que sí? Pues sigue nuestro Blog y nuestras redes sociales porqué pronto compartiremos una receta genial, fácil y deliciosa.
Costa recomienda seguir una alimentación variada y un estilo de vida saludable.